Durante bastante tiempo se ha discutido en la lista la posibilidad de definir la características de un módulo estándar adaptado a las peculiaridades del sistema Märklin. En esta sección vamos a presentar lo ya definido, y exponer lo pendiente de normalización. Asimismo repasamos en que consiste esta variedad de modelismo, y lo que ya se ha hecho anteriormente. Los avances en la tarea se irán reflejando en esta página, y ya podemos mostrar los primeros resultados prácticos, con la construcción del primer módulo LCTM, por parte del compañero de Bilbao Julián Gárate, aquí. Asimismo nuestro compañero Carlos Meliveo, que ha hecho el prototipo que vemos mas abajo, nos presenta algunas fotos de la reunión anual de Módulos Maquetrén 2006, que aunque no son de 3 carriles, pueden servir de referencia para nuestro trabajo. Pueden verla aquí.
Ya en los años 60 los aficionados que se reunían periódicamente echaban de menos la posibilidad de disponer de una instalación suficientemente grande como para poder rodar sus trenes sin las limitaciones de las pequeñas maquetas caseras. Los afortunados socios de clubs con los medios suficientes podían tener una gran instalación permanente; sin embargo la inmensa mayoría tenía que conformarse con visitas a las maquetas domésticas de los amigos. Con la introducción del concepto de módulo se solucionaron varios problemas:
- Juntando suficientes elementos se podía montar una gran instalación, sólo había que procurarse un local adecuado durante un fin de semana (locales municipales, instalaciones deportivas, colegios y parroquias, etc)
- Cualquier aficionado, aún sin disponer del espacio suficiente para una maqueta en su casa, podía fabricar su módulo, aplicando todas las técnicas de modelismo empleadas en instalaciones fijas.
- Se podían celebrar reuniones a un nivel más extenso, incluso de alcance internacional, convirtiéndose en acontecimientos de primera magnitud en el mundo del modelismo ferroviario.
Un módulo es, basicamente, una sección de una posible instalación mas grande, de dimensiones y características estandarizadas. Pasamos a repasar los elementos fundamentales de esta estandarización, centrándonos ya en nuestro sistema:
Se definen de la siguiente manera:
- Fondo: De medida fija, suficiente para albergar una o dos vías paralelas y los elementos ambientales necesarios. En módulos esta dimensión se asocia a Norte-Sur.
- Alto: También de medida fija, suficiente para acoger el perfil modular, elemento fundamental del módulo.
- Ancho: De longitud variable, aunque normalmente se ajusta a una dimensión fija. Se asocia al eje Este-Oeste.
Para que los módulos puedan conjuntarse adecuadamente, necesitamos que los laterales de todos coincidan exactamente. Esto se consigue definiendo un perfil con medidas muy exactas al que todo el que fabrique uno debe atenerse. En este perfil están definidos orificios para pasar cables y los tornillos que ajustan los módulos entre sí y el lugar exacto donde descansan las vías. Si la mecanización de este elemento no es exacta, será imposible la unión entre los módulos. Si vamos a realizar un grupo de módulos representando una instalación mas grande, que siempre van a exponerse conjuntamente, podemos definir perfiles intermedios personalizados.
Normalmente se define una altura fija medida desde la superficie superior del raíl de la vías hasta el suelo. Para ajustar esto en la práctica, se instalan patas regulables en altura en cada módulo. Esto es preferible a sostener los módulos con caballetes u otros sistemas que imposibilitan el ajuste fino de la altura.
Se emplea habitualmente tablero contrachapado marino, que presenta buenas características en cuanto a estabilidad frente a la deformación, y es resistente a la humedad. La estructura se refuerza convenientemente con elementos de madera o ángulos metálicos.
Hasta ahora la mayoría de los módulos se ha realizado para el sistema de dos carriles en DC. La vías habituales de este sistema incorporan los dos raíles y las traviesas de plástico, sin mas soporte. Ello lleva a la necesidad de incorporar bases de adaptación, ya sea en corcho u otros materiales, así como la decoración con balastro, etc. Asimismo se adaptan los extremos para poder realizar los empalmes de una manera fiable, mediante varios sistemas. En el documento que adjuntamos sobre los sistemas mas empleados pueden verse alguno de ellos. En nuestro caso usaremos nuestra estupenda vía "C". Esto simplifica mucho la construcción.
En la definición del estándar se incluye el número de cables, la función de cada uno y el conector para empalmar los módulos entre sí.
Al ser un módulo una trozo pequeño de maqueta realizado habitualmente por una sola persona, esta puede poner todo su dedicación en la decoración del mismo. El módulo ideal representa una sección de un trayecto, una estación o una instalación ferroviaria, preferiblemente con una ambientación en una época indefinida, pues por el van a rodar trenes de toda época. (Aunque en la reuniones modulares nunca se critica demasiado la mezcla de material). La estandarización debe de incluir los tonos de color en hierba, tierra, óxido en los raíles, balasto, etc. No son aconsejables fondo de paisaje, pues el montaje final nunca puede ser homogéneo.
La definición del cableado debe permitir ambos sistemas y estar dotado de la suficiente flexibilidad como para poder adaptarse a todas las combinaciones. Tenemos que partir del principio de que siempre va a haber un control digital en la instalación, pero que las locomotoras analógicas se van a poderse utilizar. Esto puede conseguirse con la utilización de dos circuitos independientes, ya que nuestros módulos serán de doble vía. De todos modos, el control digital facilita enormemente la construcción modular, por lo que de ahorro de cableado significa.
De nuevo la definición del cableado es la que nos va a permitir integrar todos estos elementos de una manera fácil. Básicamente, aunque todo esto está pendiente de definición, podemos suponer que cada módulo es un cantón, que incluye sus señales, preferiblemente digitales. Para evitar duplicidades y problemas de última hora, se deben definir normas para la asignación de direcciones digitales de los accesorios. En principio la catenaria es siempre un problema en los módulos, pues obliga a que todos o ninguno la lleve. De todos modos, es asunto a definir.
Para una reunión hay que disponer de una o más consolas de control, un booster por cada cierto número de módulos, y la fuentes de alimentación necesarias, asi como el cableado y los accesorios pertinentes. Uno de los últimos modelos que incluyen control integral, como la Central Station, son la elección ideal.
El mayor inconveniente de la construcción de módulos reside en que la suma de todas la aportaciones no es suficiente: Alguien tiene que poner los extremos. Se podría considerar un extremo como un módulo más, pero tiene dos inconvenientes: Su tamaño, ya que el extremo incorpora una o más curvas completas, lo que da unas dimensiones mínimas de mas de 1.00x1.00 mts., y que para el que le toca construirlo supone un trabajo extra de le sustrae de realizar un módulo estándar más atractivo. En clubs importantes, los extremos se guardan en instalaciones propias, pero en nuestro caso, a alguien le tendría que tocar guardar y mantener un cajón de unas dimensiones que no todos los domicilios permiten. Nos podríamos preguntar que porqué no realizar módulos curvos para componer un circuito oval. Esta solución es factible y deseable, pero necesita de la disponibilidad de un número mínimo de módulos para que la instalación quede mas o menos presentable. Además son necesarios 4 módulos de este tipo. Este tema quizás sea el más problemático del tema modular, aunque también es cierto que no nos impide acometer la construcción de nuestros módulos, confiando que en el futuro podamos resolver el problema de una manera u otra.
El colectivo de los aficionados fieles a la Marca presenta características propias, que condicionan el diseño modular. En primer
lugar, el "Marklinista" típico, aunque dispone de maqueta en algunos casos, es, básicamente, coleccionista. Una locomotora o unos vagones Märklin no son
sólo elementos de una instalación: son en sí objetos de colección, y podríamos afirmar que la mayoría del material se encuentra bien resguardado en las
vitrinas. Esto desvía el interés de otros asuntos, prueba de ello es el gran número de aficionados que "pasa" del tema digital y de la parte técnica de
la afición. ¿Como acoge este colectivo el tema de los módulos? Por la parte negativa, con desinterés, pues la construcción de un módulo implica trabajos
que exceden el alcance de sus medios; carpintería, decoración, electricidad... De otro lado, en la vertiente positiva, supondría la posibilidad para
aquellos que ruedan sus trenes esporádicamente de poder disfrutar de esa experiencia sin tener que construir una maqueta propia. Esto está muy
condicionado por la dispersión geográfica; no es lo mismo para el aficionado de Madrid u otra gran ciudad, donde pueden reunirse fácilmente suficientes
"moduleros", que para el de un municipio mas pequeño, donde posiblemente sea el único, lo que le supone desplazamientos y otros inconvenientes.
De todos modos tenemos la seguridad de que en nuestro grupo puede haber un número suficiente de interesados en el tema como para poder llevar a buen
término una futura reunión modular.
En los años de existencia de LCTM se ha hablado en varias ocasiones del tema modular. Si bien nunca parece haber suscitado el asunto un interés generalizado, han habido suficientes aportaciones para poder definir las bases de un módulo estándar. A la cabeza de las contribuciones para esta estandarización se encuentra nuestro compañero Carlos Meliveo (kioskofeve) de Bilbao, que ha suministrado casi todo el material que se incluye en esta página. Además incluimos el completo trabajo de compilación sobre otros sistemas modulares que realizó Peli, aquí.
Un módulo LCTM es un elemento que se ajusta a las definiciones expuestas en la primera parte, con las siguientes características propias:
- Evidentemente el módulo formará parte de una instalación de 3 carriles en corriente alterna, sistema Märklin, ya sea analógica o digital.
- El módulo incluye doble vía, que será clase "C".
- La definición del perfil corresponde a uno tipo B96 montaña-valle como puede verse el gráfico adjunto.
- El ancho Este-Oeste del módulo, aunque no obligatorio, es conveniente que sea múltiplo de los tramos estándar de vía "C" de Märklin, para evitar cortes.
- Los módulos se soportaran con una patas ajustables en altura (gráfico adjunto).
- Cableado, conectores y homogeneización ambiental, pendientes de definición.
- Extremos, pendientes de definición.
Planos de los perfiles exteriores e intermedio y de la pata. Click para ampliar.
Prototipo fabricado por Carlos Meliveo, según las especificaciones definidas hasta ahora.
Dos conectores propuestos por miembros de LCTM. Aún por definir.
Los materiales, para esta primera fase, son muy sencillos:
- Tablero contrachapado, calidad marino, de 10 mm de espesor.
- Refuerzos para la uniones en ángulo recto, ya sean listones de pino o escuadras metálicas. (Véase esquema)
- Cola blanca de carpintero.
- Patas con ajuste en altura, que pueden ser metálicas (se venden en tiendas de bricolage) o de madera con el elemento de ajuste embutido. (Véase foto y esquema). La forma en la que las patas se sujetan está por definir, aunque lo ideal sería una pieza metálica atornillada al módulo que sujetara la pata con un tornillo o palometa.
- Vía "C", cables, y conectores para los mismos (pendientes de definir), y tornillos para fijar la vía. En los extremos de la vía hay que eliminar los conectores para aislar de forma completa, mecánica y eléctricamente, los tramos de cada módulo. La perfección en la elaboración del perfil lateral, ayudada por el juego en el ajuste de los tornillos de unión, permitirán un buen ajuste entre los tramos. La continuidad eléctrica se realizará por medio de los cables de conexión. Se recomienda soldar los cable a la vía, en vez de emplear los conectores "Fast-On" habituales, para más seguridad en el transporte.
- Materiales de decoración, empleando las técnicas habituales con malla, masilla, etc. Edificios, accesorios, todo aquello que se estime adecuado.
Con esto podemos empezar, y aunque estamos en una primera fase, y aún está algo lejano el momento en que podamos reunirnos a disfrutar de nuestros módulos, es suficiente como para embarcarnos en la construcción, y dejar que la experiencia diaria nos vaya reclamando las soluciones pendientes. Con la colaboración de todos los interesados, pronto nos veremos orgullosos como nuestros trenes circulan por nuestros módulos LCTM.
En este tema se aplica en toda su verdad aquello de "A Dios rogando y con el mazo dando"...